Los diferentes huesos del cuerpo humano crecen de manera diferente en función de la edad de la persona, y lo mismo pasa con los huesos de la cara.
Los huesos de la parte superior de la boca, o maxilar, crecen desde los 0 años hasta los 10 años, mientras que los huesos de la parte inferior, o mandíbulas, crecen más a partir de los 11 años. Es en este momento, cuando los niños pasan a convertirse en adultos a nivel bucodental.
Normalmente el desarrollo de la mandíbula continúa hasta los 19 años.
Prognatismo
Cuando el crecimiento de la mandíbula (que no del maxilar) se desarrolla de forma más prominente se conoce como prognatismo.
Como consecuencia de este hecho la parte inferior de la boca, sobrepasa la superior y puede traer consigo:
- Tensiones en la zona craneal y dolores de cabeza
- Desgastes excesivos de las piezas dentales
- Sobrecarga de la mandíbula
- Problemas de pronunciación como el ceceo
Retrotagnia
Al contrario que en el caso anterior, la retrotagnia se trata de una irregularidad mandibular que provoca el retraimiento de la mandíbula en referencia con el maxilar.
Algunas de las consecuencia de este trastorno son:
- Problemas de funcionalidad bucal
- Dificultad para vocalizar bien
- Tensión en las articulaciones temporomandibulares
Lo más recomendable es desde el principio hacer una valoración de cada caso de forma individualizada ya que el origen del problema puede deberse a distintas causas y desarrollarse de maneras distintas.
Ambos trastornos para su corrección necesitan pequeñas cirugías para lo cual se realizan de forma previa estudios y radiografía que se muestran al paciente acompañados ambos de una breve explicación para darle mayor confianza y tranquilidad.
Si padeces alguna de estas afecciones o conoces a alguien que necesite ayuda con este tipo de problemas, en Clínica Garden estaremos encantados de recibiros para daros el mejor servicio personalizado y poner solución a vuestro caso con los mejores resultados.
